AMOR
por Maryemi Alonso
Eres compañero y con gran valor
te sigues quedando en este interior.
Suave devenir no suelto las armas
espirituales,
he de resistir con suave templanza,
ya, no importa nada… tan solo sentir
hálito de vida, que existe en mí.
Me has dado respuesta a tanta inquietud.
Es tonto moverme si no es a la luz.
Yo camino errante hacia mi destino
en cada segundo siento el suspiro
de haber llegado al cierto sendero
donde el caminante se vuelve espiritual guerrero.
Nadie ha de negarle lo que ya ha sentido.
Es firme guerrero espiritual. Es un ser
sumiso.
Amando a la vida es un ser consciente
y en ese terreno se siente valiente.
¡Con cuanto tesón corazón amado
te aferrabas siempre, hasta desesperado!
Las respuestas vienen y también las
manos.
Son manos que ya lo lograron,
y que pujan fuerte por seguir,
cantando alabanzas.
Siguen caminando hacia el fin del cuerpo
pero no del Alma.
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